Mi articulo anterior no estaba supuesto a tener una segunda parte, pero ya que por el mismo fui acusado de «confundir» a la gente y hasta de ser un «destructor de la industria del fitness», me vi movido a escribir esta segunda parte, mas que nada para aclarar algunas ideas que pudieran haber creado confusión, además espero que esta segunda parte pueda servir un poco de guía para los que buscan ciertos resultados en el gimnasio.
Ahora bien, como le contesté a una señora que me pregunto sobre el Pilates después de haber leído el articulo. 1) Casi cualquier tipo de actividad es mejor que ninguna, todas tienen cierto grado de efectividad. Al final del día depende de qué buscas y porqué haces lo que haces; 2) una pasión es una pasión. Si haces algo porque realmente te gusta, no importa lo que yo diga sobre efectividad o desventajas. Si mañana me dicen que las pesas me van a causar una muerte súbita en un año, con más gusto le doy más duro, ¡para que en un año tengan que buscar una caja bien grande donde meterme, como dice mi amigo Guillermo! Por lo que tampoco le pediría a un maratonista que deje de correr, por mas que me guste cogerlo de relajo. Nada que no se hace con pasión en la vida tiene sentido. Entonces, ¿duras una hora en la caminadora o la bicicleta porque te apasiona o porque buscas resultados?
Ahora bien, si la respuesta del cambio de composición corporal no está en los aeróbicos, ¿cómo se logra ese cuerpo al que todos anhelamos? ¿Qué tipo de ejercicios son los que más nos benefician, tanto físicamente como a nuestra salud?
Pues, lo primero y más importante es la alimentación. Realmente no me importa qué tipo y que cantidad de ejercicios haces, si no comes adecuadamente para tu nivel de actividad, tanto cuantitativa como cualitativamente, nunca tendrás los resultados esperados. De hecho, si sólo pudiera hacer una cosa en la vida, entre entrenar y alimentarme correctamente, elegiría alimentarme correctamente.
La comida es el fármaco más potente que existe, es capaz de darte salud y belleza o darte enfermedad y sufrimiento. Y no nos dejemos dormir por cuentos, no existe tal cosa como un “gordito saludable”, el simple hecho de que una persona acumule grasa de más, es un síntoma de un trastorno metabólico causado por exceso o mala elección de alimentación en el 99.99% de los casos, que degenerara en serios problemas de salud. Y olvidémonos de estar contando calorías, una caloría NO es igual a una caloría. A igual ingesta calórica, la composición, proporción, procesamiento y hasta la cocción de los varios macronutrientes (proteínas, grasas y carbohidratos), puede dar resultados MUY diferentes, tanto físicos como de salud.
Todo el que me conoce o lee mi página sabe que mi estilo de alimentación se basa mayormente en el modelo cazador-recolector o paleolítico, el cual se basa mayormente en comer carnes magras, vegetales, frutas y nueces, reduciendo o eliminando los alimentos procesados al mínimo. Es mi opinión, en base a lo leído, y por experiencia propia y de mis clientes, que este tipo de alimentación no sólo da los mejores cambios en composición corporal, con una drástica reducción del porcentaje de grasa, sino también que es la base de una vida saludable. Pronto les publicare un artículo al respecto. Este tipo de alimentación es sumamente ventajosa independientemente de si se entrena, o del tipo de entrenamiento o actividad que se practique.
Lo segundo es el nivel de actividad física. Usted puede estar en buena forma, si se alimenta correctamente, practicando algún deporte, haciendo rock-climbing o lo que sea, pero si quiere hacer cambios espectaculares en su cuerpo, debe dejarse de pendejadas y levantar pesas. Vamos a pensarlo, y no me canso de decirlo, ¿qué hacen los atletas profesionales de TODAS las disciplinas para estar en mejor forma? ¿Para mejorar su juego? Nadadores, beisbolistas, basquetbolistas, golfistas, tenistas, corredores de formula 1, maratonistas, ciclistas; en fin, en todas las disciplinas deportivas? (salvo el ajedrez que sólo se considera deporte en las universidades criollas. ¿Qué hacen? Le dan a los hierros. Las razones de esto son varias, entre ellas;
– A igual destreza, el jugador mas fuerte siempre tiene la ventaja
– El aumento de la masa muscular, aumenta significativamente el metabolismo (quemas más calorías/grasa las 24 horas), reduciendo el % de grasa, la grasa es “peso muerto” que cargan los deportistas, por lo que reducirla los hace mas rápidos, mas “livianos”.
– Mientras mas fortaleza, menos lesiones
– Al contrario de lo que se puede pensar, las pesas, bien hechas, mejoran la flexibilidad
– Mejoran la postura
– El entrenamiento con movimientos compuestos, hechos con pesas libres, mejoran la velocidad y la coordinación
– Mejora la capacidad anaeróbica
Ahora analiza estas razones y compáralas con tus necesidades. ¿No necesitas mas fortaleza en tu vida, para levantar el botellón de agua, cargar el bebé, voltear el colchón? ¿No quieres aumentar tu metabolismo y quemar más grasa para verte mejor? ¿No quieres proteger tu espalda baja de una lesión por levantar una caja? ¿No quieres ser más flexible y mejorar tu postura? ¿No quieres ser mas rápido y coordinado? ¿No quieres mejorar tu capacidad anaeróbica para no sofocarte cuando subes los 3 pisos cargando de fundas del supermercado? Y, ¿sabías que ningún tipo de ejercicio es tan efectivo para prevenir la osteoporosis como las pesas? ¿O que nada previene la pérdida de movilidad que acompaña la vejez como las pesas?
Pero para cerrar la parte de las pesas, volvamos a lo que más nos interesa en este artículo: pérdida de grasa y composición corporal. El sólo hecho de aumentar la masa muscular, independientemente que no pierda 1 oz de grasa, se traduce en un % de grasa más bajo. Además de eso, como dijimos anteriormente, aumentar la masa muscular se traduce en un aumento del metabolismo que a su vez se traduce en un mayor consumo calórico las 24 horas del día y en cada actividad. Y no por nada, pero solo con las pesas, bien hechas claro, se consigue la figura atlética y balanceada que sólo unos músculos bien tonificados pueden dar.
Y entonces, ¿nada de cardio, nada de aeróbicos? Bueno, en el caso que necesites o quieras perder esa grasita mas rápido, la respuesta NO es combinar tus pesas con largas tandas de aeróbicos, sino con HIIT o High Inetsity Interval Training, entrenamiento de intervalos en español. Esto consiste, después de un calentamiento, de tandas cortas de algún tipo de ejercicio tipo cardiovascular como correr, bicicleta o subir escaleras a la máxima intensidad que le sea posible, seguido de tandas un poco más largas donde la intensidad baja considerablemente para permitir la recuperación antes de la otra tanta de alta intensidad.
Este tipo de entrenamiento deja de ser aeróbico y pasa a ser anaeróbico, la diferencia con las pesas es que se es un entrenamiento láctico a nivel de todo el cuerpo y no focalizado a un músculo. ¿Recuerdan en el artículo anterior que hablamos de los que corren los 100 mts? Es básicamente lo mismo, ellos corren 100 mts en 10 segundos, descansan y vuelven y corren. Este tipo de entrenamiento es lo ideal para perder grasa rápidamente sin afectar negativamente la masa muscular, que nunca olvides, es tu principal activo.
Por último, no puedo dejar de mencionar lo que los gringos llaman NEPA, o Non Exercise Physical Activity (actividad física no de ejercicio). Esto también es sumamente importante y no niego que es el área donde yo más deseo trabajar, sólo para que lo sepan, yo personalmente no hago HIIT. NEPA trata de todas las actividades que requieren un mínimo de trabajo físico, pero que no haces por el simple hecho de hacer ejercicio, las haces por diferentes razones, principalmente moverte y divertirte.
En este sentido entran detalles tan pequeños como subir las escaleras en vez de coger el ascensor, pararse a buscar el agua a la cocina en vez de vocearle a Primitiva que te traiga el vaso de agua, o salir a pasear por el vecindario en la tarde, criminalidad permitiendo. Pero incluye, y esto es sumamente importante, otras actividades que podemos hacer como entretenimiento en vez de sentarnos a ver televisión, como ir a jugar tennis o golf, salir a pasear con tus hijos en bicicleta, irte al valle del tetero, caminar en la arena, cortar el césped o la grama, patinar, rock climbing, artes marciales, etc….
Espero que después de leer esta segunda parte hayan quedado con menos dudas y no me califiquen mas como el jinete apocalíptico del fitness.
Articulo original publicado en www.uepa.com